3. Visite el Gran Cañón
Si viene a Las Vegas desde otra parte del país, merece la pena hacer el viaje hasta el Gran Cañón. Hay excursiones en helicóptero que le llevarán al West Rim. En este lado del cañón, podrá ver formaciones rocosas talladas de forma natural, como Eagle Point, y experimentar el puente Skywalk, que es una pasarela de cristal situada entre las paredes del cañón. Si dispone de más tiempo, puede tomar un autobús hasta el South Rim o conducir durante unas 4 horas en coche hasta el Parque Nacional.
4. Disfrute de la experiencia completa del spa
Si quiere que sus vacaciones sean más de relax que de visita, busque un hotel con un spa interno. El Vdara Hotel and Spa tiene dos plantas dedicadas a su spa, que ofrece desde tratamientos de barro para todo el cuerpo hasta masajes de aromaterapia. El Spa del Vdara también es una zona totalmente libre de dispositivos, lo que significa que puede desconectar de verdad y disfrutar de la indulgencia.
5. Diríjase a lugares menos conocidos para el tratamiento VIP
Las Vegas tiene un montón de espectáculos para todos, pero si está buscando una experiencia más íntima eche un vistazo a los teatros más pequeños. Por ejemplo, el Park Theater del MGM Resorts -que tiene sólo unos 5.200 asientos- le permite sentirse cerca de los artistas.
6. Explore el aire libre
Ir a Las Vegas no tiene por qué significar ir a un espectáculo o salir de fiesta en un club. El Área de Conservación Nacional del Cañón de las Rocas Rojas cuenta con más de una docena de rutas de senderismo y varios caminos de escalada para explorar. También puede lanzarse en tirolina con Flightlinez Zip Lines, cerca de Boulder City, o visitar la presa Hoover.
7. Eche un vistazo a la vida nocturna
Sumérjase en la vibrante vida nocturna de Las Vegas cualquier día de la semana. Vea un espectáculo de los residentes o visite algunos de los clubes nocturnos más calientes de la ciudad, como el LIGHT en el Mandalay Bay o el OMNIA en el Caesars Palace.