Alemania fue miembro no permanente del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas desde el 1 de enero de 2019 hasta el 31 de diciembre de 2020. Este fue el sexto mandato de Alemania en el Consejo, asumiendo una responsabilidad especial por la paz y la seguridad en todo el mundo y esforzándose por fortalecer el orden internacional en un momento en el que el orden multilateral, con las Naciones Unidas en el centro, se ha visto sometido a una enorme presión.

Con sus cinco miembros permanentes y sus diez miembros no permanentes elegidos por mandatos de dos años, el Consejo de Seguridad de la ONU es el único órgano de la ONU cuyas decisiones son vinculantes según el derecho internacional. Como miembro del Consejo de Seguridad, Alemania tuvo la oportunidad de posicionarse constantemente en cuestiones clave de la paz y la seguridad internacional, de responder a las crisis actuales y de incluir en la agenda sus prioridades, como el fortalecimiento del papel de las mujeres en los procesos de paz y el tratamiento del desarme.

Recordamos aquí los temas más importantes.

  • Libia: Las buenas noticias procedentes de Libia han sido escasas en los últimos años, pero varios acontecimientos recientes dan pie a la esperanza. Alemania ha seguido trabajando junto al Enviado Especial de la ONU para Libia para poner en marcha un proceso político destinado a estabilizar el país. El Proceso de Berlín, a través del cual Alemania apoya los esfuerzos de paz de la ONU, es crucial en este sentido. A principios de 2020, se celebró en Berlín una importante conferencia por invitación del secretario general de la ONU, António Guterres, y de la canciller federal, Angela Merkel, que reunió en torno a una mesa a los partidarios de las partes en conflicto. El objetivo era reducir la influencia externa y permitir así un proceso político intralibio bajo los auspicios de la ONU. En febrero de 2020, el Consejo de Seguridad afirmó su apoyo a los resultados de la conferencia en la Resolución 2510. Como presidente del Comité de Sanciones para supervisar el embargo de armas de la ONU contra Libia y la operación IRINI de la UE, Alemania desempeñó un papel importante en la aplicación concreta del embargo de armas. En Libia ya está en vigor un alto el fuego a nivel nacional. Desde principios de noviembre, 75 libios negocian en Túnez el futuro político del país y se prevén elecciones libres para diciembre de 2021.
  • Siria: Tras largas y duras negociaciones, se amplió la resolución transfronteriza, garantizando así el acceso para las entregas de ayuda humanitaria a Siria. Como copartícipe junto con Bélgica, Alemania trabajó duro para lograr este resultado, sugiriendo finalmente un compromiso para mantener la ayuda a millones de sirios.
  • Sudán: Desde el derrocamiento del dictador al-Bashir, se percibe un nuevo comienzo en Sudán y el país se encuentra en un proceso de transición, que Alemania ha apoyado desde el principio. En junio de 2020, Alemania copatrocinó con el Secretario General de la ONU, António Guterres, una Conferencia de la Asociación para Sudán con el fin de movilizar el apoyo político y financiero. Alemania y el Reino Unido pidieron en el Consejo de Seguridad una nueva misión de la ONU en Sudán. A partir de 2021, la Misión Integrada de Asistencia a la Transición de las Naciones Unidas en Sudán (UNITAMS) sustituirá a la anterior misión UNAMID y apoyará la transición a la democracia.
    • Además de su trabajo en las crisis actuales y en las cuestiones políticas, Alemania también ha incluido sus prioridades en la agenda.

      • La Agenda de Mujeres, Paz y Seguridad: En todo el mundo, la violencia sexual se utiliza cada vez más como arma en los conflictos. Alemania se esfuerza por cambiar esta situación mediante la Resolución 2467, adoptada bajo su presidencia del Consejo de Seguridad. Basándose en la Agenda Mujer, Paz y Seguridad del Consejo de Seguridad, Alemania pone el foco en las víctimas de la violencia sexual. En el futuro, los autores deberán rendir cuentas en mayor medida.
      • Desarme/no proliferación: Los temas abarcaron aquí desde las armas pequeñas hasta el desarme nuclear. En abril de 2019, Alemania volvió a incluir el desarme nuclear en el orden del día del Consejo de Seguridad por primera vez en más de siete años como prioridad de su presidencia de un mes. Aunque la Conferencia de Revisión del Tratado de No Proliferación tuvo que posponerse hasta 2021 debido a la pandemia, estos temas siguen siendo prioritarios en la agenda. En la Declaración de Berlín, firmada por los 16 países de la Iniciativa de Estocolmo, se propusieron en febrero de 2020 iniciativas para relanzar los esfuerzos de desarme nuclear. Especialmente en vista del fin del Tratado INF y del incierto futuro actual del Nuevo START, esto sigue siendo una preocupación urgente para el Gobierno alemán, más allá de la pertenencia del país al Consejo de Seguridad.
      • Clima y seguridad: El cambio climático es cada vez más importante en la labor del Consejo de Seguridad. Está desencadenando nuevos conflictos y agravando los existentes, por ejemplo en la región del lago Chad, en Sudán o en Afganistán. A pesar de la resistencia, Alemania ha incluido el tema en el orden del día. Un grupo informal de expertos de reciente creación se encargará de que este tema siga estando firmemente en la agenda del Consejo de Seguridad.
        • Alianza para el Multilateralismo

          Durante la pertenencia de Alemania al Consejo de Seguridad se adoptaron más de 100 resoluciones y quedó claro que solo se puede avanzar mediante la cooperación internacional y que las cuestiones globales urgentes -desde el cambio climático hasta la transformación digital- solo pueden resolverse conjuntamente. Por ello, además de su labor en el Consejo de Seguridad, Alemania creó la Alianza para el Multilateralismo, que fomenta la cooperación internacional y constituye un importante contrapeso al unilateralismo nacional. Sesenta países apoyan esta iniciativa.

          La pandemia de COVID-19 muestra con especial claridad, una vez más, lo vital que es la cooperación multilateral. Los virus no se detienen en las fronteras y nadie está a salvo hasta que todo el mundo esté a salvo. Por ello, los medicamentos, los equipos y las vacunas deben distribuirse de forma equitativa. Alemania también ha defendido esta idea en el Consejo de Seguridad. En la Resolución 2532, adoptada en agosto de 2020 bajo la presidencia alemana, el Consejo de Seguridad pidió un alto el fuego mundial para dar un respiro a las personas afectadas por el conflicto durante la pandemia.

          Continuar nuestro trabajo en el Consejo de Seguridad

          Alemania quiere seguir desempeñando su papel en la preservación de la paz mundial – como miembro permanente del Consejo de Seguridad. «Hemos demostrado en los dos últimos años que somos capaces de ocupar un puesto en el Consejo de Seguridad de la ONU a largo plazo», dijo el ministro de Asuntos Exteriores, Heiko Maas. «Por ello, no sólo queremos volver a presentarnos a un puesto no permanente dentro de ocho años, sino que queremos convertirnos en miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU antes de esa fecha».

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