Puedes coser una puntada corrida perfecta o hacer una puntada de manta que haría sentir orgullosa a tu abuela. Tal vez necesites rematar ese proyecto en la nueva y elegante máquina de bordar que acabas de comprar 🙂

Pero igual de importante es tu habilidad para rematar esa obra maestra cosida a mano para que sea duradera.

El método para rematar la costura a mano varía de una persona a otra, pero básicamente, estás atando el hilo de tu proyecto. Aquí hay varios métodos diferentes para terminar un proyecto cosido a mano.

Método #1

  1. Deje aproximadamente de 4 a 6 pulgadas de hilo en su proyecto. Si el hilo es demasiado corto, no podrá hacer un nudo.
  2. Ponga el proyecto en una superficie plana para evitar coser accidentalmente a través de otra capa de tela, como su ropa.
  3. Pase la aguja por el reverso o el lado equivocado de la tela. De esta manera no se verá por delante.
  4. Da la vuelta a la tela para que el reverso quede de cara a ti. Con la aguja, coge suavemente la puntada más cercana y pásala hasta que se forme un bucle.
  5. Sosteniendo el bucle con una mano y la aguja con la otra, pasa la aguja por el bucle y tira lentamente hasta que se apriete. Mantenga el bucle recto mientras tira lentamente para evitar que se retuerza. Esto ayudará a que el hilo no se enrede.
  6. Repite este paso varias veces para asegurarte de que está bien sujeto.
  7. Corta el hilo dejando una cola de media pulgada. Si cortas el hilo demasiado cerca del nudo, es probable que se deshaga.
  8. Alternativamente, después de tensar el bucle, puedes pasar la aguja por el propio nudo para asegurarlo.

    Método #2

    1. Introduce la aguja hasta la mitad de la tela. Asegúrate de que el extremo de la aguja sobresale de la tela.
    2. Enrolla el hilo restante alrededor de la aguja unas cuantas veces.
    3. Sujeta el hilo enrollado con un dedo y pasa la aguja a través de la tela hasta el final.
    4. Aprieta el nudo y recorta el hilo. ¡Voilà! Tienes un nudo!

    Método #3

    (Especialmente bueno para el punto de manta)

    1. Introduce la aguja a través de la tela cerca del último punto y tira suavemente hasta que se forme un bucle. Déjalo suelto.
    2. Pasa la aguja a través del bucle, formando un segundo bucle. Deja el segundo bucle suelto también.
    3. Ahora pasa por el segundo bucle hasta que tengas 3 bucles.
    4. Coge el hilo más cercano al primer bucle y tira lentamente de él para tensarlo.
    5. A continuación, coge el hilo más cercano a la aguja y empieza a tirar de él. Asegúrese de mantener el bucle recto, sin permitir que se retuerza.
    6. Siga tirando del hilo lentamente hasta que se forme un nudo apretado.
    7. Corte el extremo.

    Método #4

    1. Pase la aguja por el reverso de la tela.
    2. Levante 1/16 de pulgada de tela con la aguja y pásela hasta que se forme un bucle.
    3. Sujetando el bucle entre el dedo índice y el pulgar con una mano, enhebre su aguja a través de él dos o tres veces.
    4. Manteniendo el bucle recto, tire lentamente del hilo para apretarlo.
    5. Coloque su dedo en el propio nudo y continúe tirando del hilo hasta formar un nudo apretado
    6. Nota: Si su aguja tiene doble hilo, asegúrese de que su aguja pasa por los dos hilos del bucle antes de apretar en un nudo. Atrapar accidentalmente sólo un hilo es más fácil de lo que crees, resultando en una pesadilla anudada

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