Retiros tempranos

Los beneficios del diferimiento de impuestos tienen algunos costes, principalmente relacionados con la flexibilidad. Con algunas excepciones, los retiros de cuentas calificadas antes de los 59 ½ años están sujetos a una penalización del 10%, además del impuesto sobre la renta estándar sobre los retiros. La razón de esta penalización es que la política detrás de los beneficios fiscales es animar a la gente a ahorrar para la jubilación. Permitir que los titulares de las cuentas realicen retiros a mitad de carrera sin penalización podría anular este propósito.

Distribuciones mínimas obligatorias

Mientras que la penalización por retiro anticipado obliga a la gente a mantener el dinero en sus cuentas de jubilación, la regla de las distribuciones mínimas obligatorias obliga a la gente a sacarlo. Dado que el dinero de estas cuentas tiene impuestos diferidos, el gobierno tiene interés en garantizar que no se mantenga en la cuenta ad infinitum. El importe de la distribución mínima requerida se divide entre la esperanza de vida de la persona, en función de su edad. El IRS publica las tablas con las que se calcula la esperanza de vida, por lo que factores individuales como la salud son irrelevantes. Por lo tanto, debe retirar aproximadamente 1/20 de la cuenta durante ese año, lo que está sujeto al impuesto sobre la renta. Si no se retira la distribución mínima requerida, la multa será del 50%.

Tipos de cuentas cualificadas

Las cuentas de jubilación cualificadas pueden adoptar la forma de IRA tradicionales, IRA simplificadas (también llamadas «SEP»), planes de jubilación patrocinados por el empleador e IRA Roth.

Cuentas de jubilación tradicionales

Cualquier persona puede aportar a una cuenta de jubilación tradicional hasta 5.500 dólares al año si el contribuyente es menor de 50 años, o hasta 6.500 dólares al año si es mayor de 50 años. La aportación completa es deducible de impuestos si el contribuyente no está cubierto por otro plan de jubilación en el trabajo. Si el contribuyente está cubierto por otro plan de jubilación en el trabajo, las contribuciones a la IRA tradicional sólo son totalmente deducibles para las personas que ganan hasta, a partir de 2017, 62.000 dólares al año o, para las parejas casadas, hasta 99.000 dólares. Por encima de esos niveles de ingresos, para las personas cubiertas por los planes de jubilación en el trabajo, las deducciones fiscales se reducen gradualmente, lo que hace que la IRA sea una opción mucho menos atractiva.

Los retiros de las IRA tradicionales están sujetos a las limitaciones de edad que hemos comentado anteriormente, incluyendo la penalización por el dinero retirado antes de los 59 ½ años. Sin embargo, hay excepciones que permiten retirar dinero antes de esa edad sin penalización (aunque no sin impuestos sobre la renta en las distribuciones). Entre ellas se encuentran los retiros:

– necesarios por incapacidad del titular,

– para cumplir una orden de relaciones domésticas cualificada,

– necesario para determinados gastos de educación superior cualificados,

– para comprar una primera vivienda, hasta un retiro de 10.000 dólares,

– para satisfacer ciertas deudas fiscales,

– para pagar algunos gastos médicos no reembolsados de alto coste, y

– para pagar las primas del seguro médico mientras se está desempleado.

IRAs SEP

La IRA SEP es una forma de plan cualificado patrocinado por el empleador que es menos complejo que otros planes de jubilación patrocinados por el empleador, como el 401(k). Permite al propietario de una pequeña empresa establecer un plan de jubilación cualificado para sí mismo o para sus empleados sin tener que pasar por las molestias y los gastos de establecer un 401(k). Los propietarios de empresas suelen utilizar las cuentas IRA SEP para financiar sus propias jubilaciones porque las deducciones de las aportaciones son mucho más amplias que las de las cuentas IRA tradicionales. Mientras que las aportaciones a las IRA tradicionales están limitadas a 5500 dólares (o 6500 dólares, para los mayores de 50 años), las aportaciones a las IRA SEP pueden llegar a ser de 54.000 dólares (a partir de 2017). Sin embargo, las contribuciones de los empleados están limitadas al 25% de sus ingresos, mientras que las contribuciones de los empresarios están limitadas al 20%. Además, cuando la empresaria utiliza una IRA SEP para sí misma, debe financiarse con los ingresos del autónomo, aunque tenga otro trabajo.

Las normas de retirada, penalización e impuestos son sustancialmente las mismas que las de las IRAs tradicionales.

Un dispositivo similar, llamado SavingsIncentive Match Plan for Employees o «SIMPLE» IRA, a pesar de su nombre, es un poco más complejo que el SEP, aunque no es tan complejo como establecer un plan de jubilación aqualificado. Aunque sus matices son diferentes a los de la SEP, su función esencial y la mayoría de sus reglas son similares.

En nuestra presentación de continuación, veremos los planes de jubilación calificados, las IRAs Roth y las IRAs de reinversión, conyugales y heredadas.

http://www.schwab.com/public/schwab/investing/retirement_and_planning/understanding_iras/roth_ira/withdrawal_rules