Hollywood influye en el gusto de los estadounidenses de innumerables maneras, afectando a todo, desde la ropa y los coches hasta los peinados. Resulta que, en muchos casos, incluso afecta a cómo los padres nombran a sus hijos. El análisis de más de un siglo de datos meticulosos de la Administración de la Seguridad Social (SSA), que registra la popularidad de los nombres de los bebés, ofreció a The Hollywood Reporter una prueba contundente de la conexión entre las celebridades y los personajes de ficción y los apodos que terminan en los certificados de nacimiento.
¿De repente se ven Scarletts en todos los patios de recreo? La trayectoria profesional de Johansson, de ingenua a estrella, es en gran parte responsable de que eso ocurra. ¿Qué pasa con todos esos Archer en la clase de mamá y yo? Hay un montón de fans acérrimos de cierto dibujo animado homónimo de FX en la televisión. ¿Alguna vez te has preguntado por qué ya casi no hay pequeñas Lindsays? Dale las gracias a Lohan por convertir su nombre en tóxico.
Sigue leyendo para conocer 100 ejemplos de cómo la cultura pop ha florecido en las ramas de los árboles genealógicos -y quizás en la tuya propia-.
Contribuidores: Eli Flesch, Devon Jefferson, Tori Latham, Candice Lim, Hannah Malach, Jason Pham, Maya Richard-Craven, Madi Schulz, Meg Zukin, Dale Chong, Jennifer Drysdale, Alexis Faber, Carmen Triola.