Sobre el capuchón cervical
Hablar con sus hijos sobre el sexo puede ser desalentador, sin importar lo unidos que estén. Pero hablar de temas como la abstinencia, las enfermedades de transmisión sexual (ETS) y el control de la natalidad puede ayudar a reducir el riesgo de los adolescentes de un embarazo no deseado o de contraer una ETS.
La Academia Americana de Pediatría (AAP) apoya la educación sexual que incluye información tanto sobre la abstinencia como sobre el control de la natalidad. Las investigaciones han demostrado que esta información no aumenta el nivel de actividad sexual de los niños, sino que en realidad promueve y aumenta el uso adecuado de los métodos anticonceptivos entre los adolescentes sexualmente activos.
Cómo y cuándo hablar de sexo y control de la natalidad depende de usted. Proporcionar los hechos es vital, pero también es prudente decir a sus hijos cuál es su posición. Recuerde que si aborda estas cuestiones como cualquier otro tema de salud, y no como algo sucio o vergonzoso, aumentará las probabilidades de que sus hijos se sientan cómodos acudiendo a usted con cualquier pregunta o problema. Por muy incómodo que te parezca, responde a las preguntas con sinceridad. Y si no sabes las respuestas, no pasa nada por decirlo, luego averígualo e infórmate.
Si tienes dudas sobre cómo hablar con tu hijo o hija de sexo, considera consultar a tu médico. A muchos padres les resulta difícil abordar este tema, y un médico puede ofrecer una perspectiva útil.
¿Qué es el capuchón cervical?
Un capuchón cervical es una pequeña copa en forma de dedal hecha de silicona que se ajusta al cuello uterino (la parte del útero que se abre en la parte superior de la vagina). Se considera uno de los métodos anticonceptivos de barrera porque proporciona una barrera física entre el esperma del hombre y el óvulo de la mujer.
¿Cómo funciona el capuchón cervical?
El capuchón cervical impide que el esperma entre en el útero cubriendo el cuello del útero. Para una mayor protección, se pone espermicida en el capuchón antes de insertarlo cómodamente sobre el cuello uterino.
El capuchón puede insertarse hasta 6 horas antes de tener relaciones sexuales y debe dejarse puesto durante al menos 6 horas, pero no más de 48 horas. Mientras el capuchón esté colocado, se debe comprobar su posición y añadir espermicida cada vez que la pareja tenga relaciones sexuales. Después de las relaciones sexuales, debe dejarse colocado durante al menos 6 horas.
Se deben seguir las instrucciones del fabricante para retirar el capuchón. La extracción del capuchón cervical consiste en colocar un dedo en la vagina para tirar del capuchón. Dado que el capuchón debe colocarse correctamente, las mujeres que lo utilicen deben sentirse cómodas palpando el cuello del útero en el interior de la vagina.
Después de cada uso, el capuchón debe lavarse con agua y jabón suave, enjuagarse y secarse al aire, y luego guardarse en su estuche. No debe espolvorearse con talco para bebés y nunca debe utilizarse con lubricantes a base de aceite, como aceite mineral, vaselina o aceite para bebés, que pueden hacer que el capuchón se vuelva quebradizo y se agriete. Otras cremas vaginales, como los medicamentos para la infección por hongos, también pueden dañar el capuchón.
¿Cómo funciona el capuchón cervical?
En el transcurso de un año, 14 de cada 100 parejas típicas que confían en el capuchón cervical para evitar el embarazo tendrán un embarazo accidental. En el caso de las mujeres que han tenido un bebé, el capuchón cervical es menos eficaz: aproximadamente 29 de cada 100 parejas típicas que utilizan el capuchón cervical después de que la mujer haya tenido un bebé tendrán un embarazo accidental. Por supuesto, se trata de cifras medias y la posibilidad de quedarse embarazada depende de si el capuchón cervical se utiliza correctamente cada vez que la pareja mantiene relaciones sexuales.
En general, la eficacia de cada tipo de método anticonceptivo depende de muchas cosas. Entre ellas, si la persona tiene alguna condición de salud o está tomando medicamentos que puedan interferir con su uso. También depende de si el método elegido es cómodo – y de si la persona se acuerda de utilizarlo correctamente cada vez.
Protección contra las ETS
El capuchón cervical no protege contra las ETS. Las parejas que mantienen relaciones sexuales deben utilizar siempre preservativos junto con el capuchón cervical para protegerse de estas infecciones.
La abstinencia (no mantener relaciones sexuales) es el único método que previene siempre el embarazo y las ETS.
Posibles efectos secundarios
La mayoría de las mujeres que utilizan el capuchón cervical no tienen problemas, pero los posibles efectos secundarios pueden incluir:
- Los espermicidas pueden irritar la vagina y la piel circundante o causar una reacción alérgica.
- Pueden producirse olores fuertes, flujo vaginal o infección si el capuchón cervical se deja puesto demasiado tiempo.
- El material del capuchón cervical puede causar una reacción alérgica.
- El síndrome de shock tóxico (SST) es una complicación poco frecuente.
- El capuchón puede provocar cambios en el cuello del útero debido a la irritación.
¿Quién utiliza el capuchón cervical?
El capuchón cervical no suele recomendarse para la mayoría de las mujeres jóvenes y adolescentes, ya que puede ser muy difícil de colocar correctamente. La inserción del capuchón cervical requiere que la chica llegue hasta el cuello del útero con los dedos. A veces también puede salirse de su sitio durante el coito, lo que puede provocar un embarazo. El capuchón cervical no puede usarse cuando la chica tiene la menstruación.
Algunas chicas prefieren el diafragma, que funciona como el capuchón cervical pero es mucho más fácil de usar.
¿Dónde está disponible el capuchón cervical?
Un médico debe adaptar a una chica un capuchón cervical. Durante un examen pélvico, el médico determinará qué tamaño de capuchón es el adecuado para ella. A continuación, el médico o la enfermera le enseñarán a colocarse y quitarse el capuchón.
¿Cuánto cuesta el capuchón cervical?
Un capuchón cervical cuesta unos 70 dólares y debe sustituirse cada año. Además, también está el coste de la visita al médico. Muchos planes de seguro médico cubren estos costes, y las clínicas de planificación familiar (como Planned Parenthood) pueden cobrar menos. Además, el coste del espermicida es de unos 0,50 a 1,50 dólares por uso.
Revisado por: Mary L. Gavin, MD
Fecha de revisión: Agosto de 2013