5 de noviembre de 2018 All Star Pain Pain ManagementMedicina Regenerativa

El dolor articular migratorio es un dolor que se siente en una variedad de articulaciones que se produce en intervalos aleatorios con/sin signos de advertencia u otros síntomas. Esta extraña condición tiene a los investigadores desconcertados porque no pueden determinar una causa definitiva. Diagnosticar y tratar la condición es un reto para los profesionales médicos.

Hay dos formas diferentes de dolor articular migratorio. Estas categorías son:

  • Edad y desgaste general
  • Trastornos del sistema inmunitario
    • Los antecedentes familiares son útiles para diagnosticar la causa del dolor articular migratorio. Los cambios relacionados con la edad suelen empeorar con la actividad, mientras que el dolor de causa inmunitaria está presente por la mañana y mejora con la actividad. Los problemas articulares suelen ser diagnosticados por reumatólogos. Es necesaria la evaluación por parte de un especialista.

      El dolor articular es común. Según las estadísticas, aproximadamente 52,5 millones de estadounidenses fueron diagnosticados con artritis en 2012 y 2013. A veces el dolor solo afecta a una parte del cuerpo y otros experimentan la migración del dolor a otras articulaciones. La condición es común en casos de gonorrea.

      A veces el dolor solo afecta a una parte del cuerpo y otras experimenta el dolor migrando a otras articulaciones

      Hay muchas causas posibles, entre ellas:

      • Hepatitis
      • Endocarditis bacteriana
      • Enfermedad de Whipple (causada por una infección bacteriana)
      • SIDA (debilita el sistema inmunitario)
      • Lupus eritematoso sistémico (una enfermedad en la que el cuerpo se ataca a a sí mismo)
      • artritis gonocócica
      • fiebre reumatoide
      • artritis inflamatoria – artritis reumatoide
      • fibromialgia
      • artritis migratoria
        • Los síntomas del dolor articular migratorio pueden incluir:

          • Inflamación en la articulación que se produce rápidamente
          • Dolor más intenso que el de la artritis típica
          • Rigidez articular
          • Dificultad para mover la articulación o contractura
            • No existe cura para la afección; sin embargo, los síntomas pueden controlarse mediante:

              • Ejercicio y terapias alternativas
              • Dieta y suplementos – como los aceites grasos omega-3, la Glucosamina y la Condroitina
              • Medicamentos antiinflamatorios – como el Diclofenaco y el ibuprofeno y el Naproxeno
              • El dolor se puede manejar incorporando las sugerencias anteriores. Puede ser difícil evitar pensar en la condición y se desencadena por otras enfermedades o problemas de salud también. Es importante ser diagnosticado por un médico. No ignore el dolor.

                Hay poca información sobre el dolor articular migratorio en sí mismo pero, para encontrar un diagnóstico se requiere una evaluación física, una historia clínica y otras terapéuticas para determinar las posibles causas de la afección en curso.

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