En las últimas semanas de tu embarazo, puedes notar una mayor presión en la zona pélvica. Esto suele ser causado por la caída de tu bebé en su posición. Si tu fecha de parto está a la vuelta de la esquina y tu bebé aún no ha bajado a su posición, no te preocupes; algunos bebés no bajan hasta que comienza el parto. Sin embargo, hay algunos ejercicios útiles que puedes hacer para animar al bebé a bajar y al mismo tiempo preparar tu cuerpo para el parto. Evite estos ejercicios si su bebé está en posición de nalgas, ya que pueden dificultar el cambio del bebé a la posición de cabeza hacia abajo.
Caminar
Caminar es un ejercicio perfecto para las mujeres embarazadas, especialmente en los últimos trimestres. Es fácil para las articulaciones y proporciona un entrenamiento aeróbico suave, que puede ayudar a controlar el aumento de peso. Caminar también abre las caderas y relaja los músculos pélvicos, lo que puede ayudar en el proceso de aligeramiento en las últimas semanas del embarazo. Ten en cuenta que caminar se considera un ejercicio aeróbico de intensidad moderada. Si no has hecho ejercicio durante el embarazo, empieza poco a poco. Camina 10 minutos al día y ve aumentando gradualmente hasta llegar a 20 o 30 minutos.
Pelota de partos
Ejercicios con una pelota de ejercicios para ayudar a inducir el parto
Aprenda más
Calcetas
Las sentadillas aumentan el tamaño de la abertura pélvica, al tiempo que utilizan la gravedad para ayudar a su bebé a descender a la pelvis. También fortalecen tus piernas y abren las caderas para el parto. Ten cuidado al hacer sentadillas en el tercer trimestre, especialmente si no has hecho ejercicio durante todo el embarazo. Haz sentadillas contra una pared para tener más apoyo y equilibrio, o ponte en cuclillas sentada en una pelota de parto para evitar caerte o lesionarte.
Inclinaciones pélvicas
¿Qué ejercicios durante el embarazo inician el parto?
Aprende más
Las inclinaciones pélvicas deben realizarse durante todo el embarazo si es posible. El balanceo de la pelvis es una forma suave de animar al bebé a descender hacia la pelvis. También fortalece y estira todos los músculos centrales, y ayuda a aliviar el dolor en la parte baja de la espalda, que es especialmente común en el segundo y tercer trimestre. Las inclinaciones pélvicas pueden ayudar a aliviar las náuseas y la indigestión que muchas mujeres experimentan en el tercer trimestre. Para realizar las inclinaciones pélvicas, ponte de manos y rodillas, con las manos justo debajo de los hombros. Inclina suavemente la pelvis hacia delante y relaja la parte inferior de la espalda. Vuelve a llevar la pelvis a una posición neutra y repítelo durante unos dos o tres minutos.