En Colombia, es un fenómeno común que te corrijan sobre la mejor forma de escribir el nombre de este increíble país. Pero la práctica ha crecido más allá de que los gramáticos pillen a la gente desprevenida. Es un movimiento, un meme y una camiseta. Sin embargo, a pesar de las buenas intenciones de quienes están detrás de esta causa, muchos hablantes nativos de inglés siguen confundiendo «Columbia» con la ortografía aceptada «Colombia». Resulta que las razones para hacerlo no son ni una falta de educación ni una muestra de falta de respeto. Por el contrario, los angloparlantes pueden estar justificados al usar ‘Columbia’ como una ortografía alternativa.
Para empezar, a nadie se le enseña a deletrear ‘Colombia’ con una ‘u’. El país rara vez se discute en las escuelas de los países de habla inglesa. La mayoría de los atlas, el raro lugar en el que un escolar podría familiarizarse con Colombia, llevaría la ortografía correcta al etiquetar el país. Además, las personas que escriben mal «Colombia» provienen de todos los ámbitos de la vida; son médicos, políticos, trabajadores y empresarios. Así que la idea de que la gente escribe mal «Colombia» por ignorancia o falta de educación no es del todo cierta. Tampoco es probable que se trate de una conspiración mundial para enfurecer a los colombianos, ya que el mismo error persiste en el Reino Unido, Estados Unidos, Australia, Nueva Zelanda, Canadá, India y cualquier región donde se hable ampliamente el inglés. Así que debe haber alguna otra razón inherente al idioma inglés para que este error aparezca de manera independiente en tan diversos lugares.
Este niño colombiano acaba de ver a un gringo escribir mal ‘Colombia’.
De hecho, la mayoría de la gente escribe mal ‘Colombia’ porque ‘Columbia’ es como suena cuando se habla en voz alta. La ‘-lom-‘ en ‘Colombia’ se pronuncia como ‘lum’ en ‘lumber’. Del mismo modo, la segunda «o» de palabras como «colon» y «Colorado» suena más como «colun» y «Colurado». Estas palabras también ponen el acento en la primera sílaba en lugar de en la segunda. Sin embargo, en el caso de «Colombia», el acento se coloca universalmente en la segunda sílaba entre los angloparlantes y esto provoca cierta confusión entre las personas que no suelen ver la palabra escrita. Lo que ocurre entonces es que el cerebro «adivina» cuál podría ser la ortografía basándose en las palabras que ya tiene en su léxico. Para muchos, esto podría equivaler al homónimo «Columbia», que existe con mayor frecuencia a través de nombres como «Columbia University», «British Columbia» y «Columbia Pictures». Además, la etimología del nombre «Colombia» proviene del explorador que fundó inicialmente el continente. En inglés -gulp- hay una ‘u’ en ‘Christopher Columbus’.
Así que la razón por la que muchos extranjeros confunden ‘Columbia’ con ‘Colombia’ no es por falta de respeto; es sólo que el cerebro se las arregla para una palabra con la que raramente se ha encontrado. Pero aquí es donde la historia se pone interesante. ¿Y si lo que ocurre aquí es algo más que múltiples errores fonológicos cometidos en todo el mundo? Y si se trata de una prueba de que la ortografía de la palabra está, de hecho, en proceso de cambio en la lengua inglesa?
Tensas discusiones diplomáticas con Santos tuvieron lugar en la Casa Blanca mientras Obama deseaba por error ‘a todos los colombianos Felices Fiestas’.
Para estar seguros, todas las comunidades lingüísticas tienen la prerrogativa de nombrar a un país exactamente como les plazca. Por eso decimos ‘Alemania’ y no ‘Deutschland’. Por eso «Italia» no es «Italia» y «Japón» no es «Nihon». También funciona con las ciudades, ya que nombres como «Bogotá» y «Medellín» no conservan los acentos del inglés. Otros idiomas también actúan con esta prerrogativa, y muchos cambian la ortografía de los países para acomodar sus propios sonidos en el alfabeto. Por ejemplo, los alemanes escriben «Colombia» como «Kolumbien» y los españoles dicen «Nueva Zelanda». Así que si una comunidad lingüística decidiera cambiar la ortografía de ‘Colombia’ por ‘Columbia’, estaría en su perfecto derecho de hacerlo. Pero, ¿cómo se produciría ese cambio?
A diferencia de los franceses, los angloparlantes tienen pocas autoridades centrales a las que acudir para que les orienten sobre la ortografía. Por ejemplo, se puede recurrir al CIA World Factbook o al Oxford English Dictionary para saber la ortografía correcta de un país, pero rara vez se consideran autoridades infalibles a las que se acude en busca de orientación. A modo de ejemplo, desde 1991 es formalmente correcto decir «Ucrania» en lugar de «Ucrania», aunque muchos no aceptan que esto último sea un error. Los ucranianos, sin embargo, han reaccionado con estoicismo a este error común del inglés y el movimiento #itsUkrainenottheUkraine aún no ha cobrado fuerza.
Las protestas arreciaron en Colombia por el uso continuado de la palabra ‘Colombia’ por parte de los extranjeros.
Así que, en ausencia de una autoridad centralizada o de una «policía ortográfica», puede darse el caso de que la ortografía de «Colombia» resulte ser precisamente la que la mayoría de los angloparlantes dicen que es. Me viene a la mente la célebre frase del filósofo austriaco Ludwig Wittgenstein «el significado es el uso» al hablar de cómo una comunidad lingüística puede determinar las reglas de su lengua al usarla de una manera específica, y que no hay una lengua correcta más allá de la comunidad de hablantes. Es totalmente posible que dentro de una década, al igual que muchas palabras de la lengua inglesa que tienen más de una ortografía aceptada, ‘Columbia’ sea una ortografía alternativa perfectamente aceptable a ‘Colombia’.
Por eso, cuando alguien corrige la forma en que escribes ‘Colombia’, puedes estar tranquilo de que no es porque seas un ignorante; simplemente eres un participante de una lengua en evolución y has elegido ponerte del lado de la mayoría de los hablantes de inglés que la escriben como suena. Como hablante nativo de inglés, estás en tu perfecto derecho de deletrearlo como lo hace la gente de tu comunidad.
A menos, claro, que acabes de leer este artículo. En cuyo caso no hay excusa para que tu culo gringo siga deletreando ‘Columbia’.