Puede que pienses en los murciélagos como criaturas espeluznantes que vuelan en la oscuridad de la noche, pero resulta que tienen un gran impacto en la agricultura y el turismo en Texas.
A las afueras de San Antonio, la Bracken Cave Preserve es el hogar de verano de la mayor colonia de murciélagos del mundo, con más de 15 millones de murciélagos mexicanos de cola libre que viven allí desde marzo hasta octubre aproximadamente.
Alrededor del atardecer de cada día, la fauna se anima y los millones de murciélagos comienzan a salir de la cueva, listos para recorrer los cielos nocturnos. «Estas salidas son tan intensas que aparecen en el radar Doppler como nubes que se forman sobre estos refugios de murciélagos», explica Fran Hutchins, director de la Reserva de la Cueva Bracken de Bat Conservation International.
Bat Conservation International acoge a grupos de visitantes para educarles sobre los murciélagos y exponerles a la experiencia única de los murciélagos saliendo de la cueva. «Cuando sales y ves el ‘bat-nado’… cuando puedes verlo, oírlo y olerlo, es una experiencia emotiva», dijo Hutchins.
«¡Están por todas partes! Hay tantos», dijo Sam Michaels, que visitaba la reserva por primera vez. «Es como increíble; no tenía ni idea.»
Aunque la experiencia atrae a los amantes de los murciélagos y a los turistas al sur de Texas, los murciélagos también juegan un gran papel en el control de plagas para los agricultores de la zona.
«No tener murciélagos es un mundo lleno de muchos bichos que pican», dijo Hutchins. «Esta colonia va a comer unas 147 toneladas de bichos esta noche, realmente importantes para nuestros agricultores locales», dijo.
Los murciélagos pueden volar hasta 3.000 metros de altura y viajar unos 100 kilómetros desde la cueva a la caza de alimentos, lo que a su vez ayuda a preservar los cultivos locales.
Los biólogos especializados en murciélagos estiman que estas criaturas pueden ahorrar a los agricultores miles de millones de dólares anuales en el control de plagas en todo el país. El algodón es uno de los cultivos más beneficiados, junto con el maíz, el sorgo e incluso las nueces de Texas.
John y Jimma Byrd son propietarios de un huerto de pacanas en San Saba, Texas. Construyeron una casa para murciélagos en su propiedad después de descubrir que tenían varias especies de murciélagos en su granja. «También trabajan todas las noches. No hay que pagarles, nada más que un lugar para vivir», bromean los Byrds.
Es un beneficio para los Byrds, que cultivan de forma orgánica, ya que los murciélagos se alimentan de plagas como las polillas que gustan de sus pacanas.
«Todos los antiguos cultivadores de pacanas solían decir que los murciélagos son buenos para un huerto… y por supuesto lo he sospechado», dijo John Byrd. «Lo que estamos haciendo no es algo nuevo, sino que es realmente antiguo», continuó. «Aumenta nuestro aprecio por nuestra granja y todo lo que coexiste».
Mientras tanto, los millones de murciélagos que viven en la cueva de Bracken se han dirigido ahora a México, donde pasarán el invierno antes de regresar la próxima primavera.