Si un edredón está relleno de plumón, plumas o una alternativa a los dos, debe ser ligero, cálido y envolvente: el entorno perfecto para un sueño profundo y reparador. Los buenos edredones son caros; hay que protegerlos.
Es sorprendentemente fácil -y rentable- hacer una funda de edredón personalizada para el verano con dos sábanas nuevas (o viejas). Sólo tienes que combinar diferentes tonos, o una sábana lisa con una estampada, y coser en línea recta la parte superior y los lados. Para que resulte más fácil, prescinde de los habituales cierres de botones en la parte inferior y añade lazos de cinta de grosgrain. Esta funda sencilla y económica te ayudará a mantener limpio el edredón y eliminará la necesidad de una sábana superior, lo que significa que tu cama será más fácil de hacer. Y ya que una funda nórdica de sábanas es tan fácil de hacer, ¿por qué no coser una segunda, para los días de lavandería, mientras estás en ello?
Aquí hay otra cosa buena: para mantener tu edredón ordenado en su sitio, pon la funda del revés y cose dos trozos de cinta de tela de cinco pulgadas de largo en las cuatro esquinas. A continuación, ate la cinta de tela alrededor de cada esquina del edredón, y duerma tranquilo.