Descrito como rata de río o rata gigante de pantano, el roedor conocido en Norteamérica como nutria procede originalmente de Sudamérica, donde se llama coipo. Importada hace más de un siglo por su piel, desde entonces se ha convertido en una plaga autóctona, causando daños especialmente importantes en las orillas de los pantanos de Luisiana. Pero las recientes condiciones meteorológicas han invitado a la nutria a desplazarse a más y más zonas del país, y se teoriza que esta especie invasora se habrá trasladado a casi todos los estados a mediados de siglo.
¿Por qué está aquí?
La nutria, que originalmente era el nombre utilizado para la piel de un coipo hasta que el nombre se impuso para el propio animal en Norteamérica, fue llevada a California en 1899 por su piel. Pero tras cuatro décadas, un fuerte descenso del comercio hizo que los ganaderos soltaran a los bichos en la naturaleza. Los organismos estatales y federales los transportaron más lejos, ofreciéndolos como medio de control de la vegetación, y empresarios ventajistas se apoderaron de la idea de venderlos como «cortadores de maleza.»
La Sociedad Geológica de Estados Unidos ha atribuido la migración hacia el norte de la nutria a las condiciones climáticas actuales. El tiempo más cálido y los inviernos especialmente suaves han animado a este roedor a explorar hasta regiones que normalmente rehuiría, y su capacidad de adaptación le permite permanecer allí incluso cuando las condiciones vuelven a ser más duras. Siempre que haya agua cerca, una nutria puede sentirse como en casa, viviendo en madrigueras con aberturas por debajo de la superficie del agua.
¿Qué aspecto tiene?
En su mayor parte, la nutria sigue siendo una especie relativamente desconocida, a no ser que veas regularmente Dinastía de Patos. A veces se confunde con un pequeño castor o una gran rata almizclera, la cola de la nutria es redonda y sus dos grandes dientes delanteros son de un sorprendente color naranja oscuro. Como parte de su naturaleza semiacuática, las patas traseras son palmeadas, y las tetas de la hembra están colocadas en lo alto de sus costados para que sus crías puedan amamantar mientras ella está nadando o flotando en el lugar.
¿Qué daño hace?
Los casos más extremos de daños causados por la nutria se dan a lo largo de las regiones de la Costa del Golfo de Luisiana y Texas, y el Departamento de Drenaje de Jefferson Parish gasta más de medio millón de dólares cada año en reparaciones. Las madrigueras afectan a los diques, las orillas, las presas, los diques y los lechos de las carreteras, e incluso pueden llegar a debilitar los cimientos de los edificios, los muelles y los embarcaderos.
Las inundaciones resultantes han devastado a los agricultores, que también tienen que enfrentarse a que sus cultivos sean devorados por este bicho, en su mayoría herbívoro. El ganado también está en peligro si bebe agua contaminada por nutrias, que son portadoras de parásitos (como tenias y gusanos) y patógenos que causan enfermedades (como la tularemia y la tuberculosis). Las personas y los animales domésticos también corren peligro si se bañan en aguas infectadas.
La situación es tan grave en Luisiana que su Departamento de Vida Silvestre y Pesca anima a los residentes a capturar el animal para alimentarse, publicando en Internet recetas del chef Philippe Parola (que en ocasiones nombra los platos con el nombre francés de la nutria: ragondin). También ofrece una tabla nutricional que muestra que la carne de nutria tiene la mayor cantidad de proteínas y la menor cantidad de grasa y colesterol en comparación con la de pollo, pavo y carne de vacuno.
Pero no hace falta ser dueño de una granja o vivir en la Costa del Golfo para que tu patio sea invadido por nutrias, gracias a su expansión hacia el norte. Si vives cerca de un arroyo o estanque y no eres ajeno a los castores u otras especies semiacuáticas, es posible que también estés muy familiarizado con las nutrias. Si pueden causar tantos estragos en Luisiana y Texas, ¡imagina lo que pueden hacer en tu precioso jardín!
Lo que puedes hacer
Ten en cuenta que en algunas regiones las nutrias capturadas no pueden ser liberadas legalmente en la naturaleza. Así que si planeas lidiar con estas plagas invasoras sin llamar a un profesional, tendrás que tomar medidas para preparar qué hacer con ella después. Si no puede eutanasiarlo usted mismo, puede ser necesario acudir a un veterinario. Consulte con su departamento local de vida silvestre para conocer la normativa de su zona.
Una trampa de jaula extragrande debería ser suficiente, cebada con boniatos o cualquier tipo de verdura por la que su intruso haya mostrado gusto en su jardín. Havahart® ofrece versiones de jaulas de una o dos puertas en tamaño extragrande, para satisfacer cualquier preferencia y adaptarse a su estilo de captura. Publique una foto de su exitosa captura en nuestra página de Facebook, un lugar donde también puede hacer preguntas sobre la nutria.