La rehabilitación pélvica se centra principalmente en los trastornos asociados a la pelvis, la estructura ósea situada entre las piernas y la columna vertebral, y al suelo pélvico, el grupo de músculos que forman la parte inferior o «suelo» de la pelvis. El suelo pélvico proporciona soporte a los órganos de la pelvis, ayuda a controlar el intestino y la vejiga, desempeña un papel en las actividades sexuales, proporciona estabilidad por sus uniones a varios ligamentos de la pelvis y proporciona soporte postural al tronco.
Condiciones pélvicas tratadas
Estoy especializada en la rehabilitación pélvica de la mujer que incluye condiciones como:
- Incontinencia urinaria: La icontinencia urinaria es la pérdida involuntaria de orina con la actividad, como toser, estornudar o correr, o la pérdida involuntaria de orina al intentar ir al baño.
- Urgencia/Frecuencia de la micción: Esto incluye experimentar una urgencia anormal de orinar que es difícil de controlar o experimentar viajes frecuentes al baño para orinar. (es decir, más de 8 veces al día)
- Prolapso de órganos pélvicos: El prolapso de órganos pélvicos es el desplazamiento de uno o más de los órganos pélvicos que contribuye al descenso de la pared vaginal, el cuello uterino o la vagina
- Dolor pélvico crónico: El dolor pélvico crónico es un dolor en el abdomen o la pelvis que ha durado más de tres meses y que no está causado por enfermedades o afecciones como la dispareunia (relaciones sexuales difíciles o dolorosas), la dismenorrea (dolores menstruales) o la endometriosis (se produce cuando el revestimiento del útero crece fuera del mismo).
- Dolor o disfunción relacionados con el embarazo: Las afecciones incluyen la diástasis de rectos (separación de la pared abdominal durante o después del embarazo), lesión o debilidad del suelo pélvico tras el parto y dolor lumbar o pélvico durante o después del embarazo.
Pruebas para determinar las causas/la gravedad
Una evaluación del suelo pélvico por parte de fisioterapia consiste en una historia clínica y una exploración física exhaustivas. El propósito de la historia es comprender la naturaleza y los antecedentes de la dolencia específica, así como los factores que contribuyen al tratamiento de la afección. La exploración física consiste en una inspección visual de la región pélvica con una observación visual de la capacidad de la persona para contraer los músculos del suelo pélvico, seguida de una palpación externa e interna de los músculos del suelo pélvico.
El propósito de la exploración física es obtener información objetiva sobre la fuerza y el control de los músculos del suelo pélvico, así como observar si hay algún prolapso de órganos pélvicos. No se requieren imágenes ni pruebas para la evaluación del suelo pélvico de fisioterapia, aunque se recomienda que se haya realizado la atención rutinaria con su proveedor de atención primaria (PCP). Esto incluye un examen físico anual y una prueba de Papanicolaou si lo recomienda su PCP.
Qué esperar en su visita
Debe esperar discutir la historia y los factores que contribuyen a su condición actual con su fisioterapeuta antes del examen de suelo pélvico de fisioterapia. Esto incluirá cualquier embarazo, parto, traumatismo en la pelvis o lesiones en el tronco o la espalda baja. A continuación, debe esperar una observación visual, externa e interna de la región pélvica y los músculos del suelo pélvico, así como su capacidad para contraer y controlar los músculos del suelo pélvico. Por último, debe esperar aprender ejercicios del suelo pélvico que realizará por su cuenta fuera de la fisioterapia para mejorar su estado.
Herramientas para fortalecer el suelo pélvico
- Ejercicios: Contracciones del suelo pélvico (ejercicios de Kegel) de forma aislada o con otros movimientos del cuerpo. Los tiempos de contracción y relajación de este ejercicio se irán progresando paulatinamente.
- Biofeedback: Electromiografía de superficie (sEMG) para detectar la actividad eléctrica de los músculos del suelo pélvico que luego se transfiere a una imagen visual y/o a una señal auditiva para dar información sobre su capacidad de contraer y controlar los músculos del suelo pélvico. Se colocan pequeños electrodos en la piel, cerca del suelo pélvico, y se conectan a un ordenador con el programa de biorretroalimentación que podrá ver y aprender.
- Estimulación eléctrica: La electricidad se utiliza para ayudar a estimular los músculos del suelo pélvico a través de electrodos colocados en la piel cerca del suelo pélvico o un electrodo vaginal interno. La estimulación eléctrica sólo está indicada si existe una debilidad significativa de los músculos del suelo pélvico.
Tratamiento de las afecciones del suelo pélvico
Los tratamientos de fisioterapia del suelo pélvico suelen ser de una hora de duración y comienzan una vez a la semana o una vez cada dos semanas. A medida que la condición de una persona mejora, la frecuencia de las visitas de fisioterapia se reduce. Los pacientes son atendidos durante seis visitas de media, pero esto puede aumentar o disminuir en función de las necesidades específicas del paciente.
Una vez que los síntomas se han resuelto los pacientes suelen hacer un seguimiento en persona o por teléfono en un mes y son dados de alta de la fisioterapia si están bien. Los ejercicios que se dan para casa suelen recomendarse que se continúen de por vida para ayudar a mantener los logros alcanzados en la terapia y prevenir una futura recurrencia de la condición.
Cuándo considerar la terapia física
Hable con su PCP si cree que puede tener una condición que se beneficiaría de la rehabilitación pélvica de terapia física. Póngase en contacto con su compañía de seguros para ver si necesita una remisión para la terapia física.