No hay una forma segura de prevenir el cáncer de próstata. Muchos factores de riesgo, como la edad, la raza y los antecedentes familiares, no se pueden controlar. Pero hay algunas cosas que puede hacer que podrían reducir su riesgo de cáncer de próstata.
Peso corporal, actividad física y dieta
Los efectos del peso corporal, la actividad física y la dieta sobre el riesgo de cáncer de próstata no están completamente claros, pero hay cosas que puede hacer que podrían reducir su riesgo.
Algunos estudios han descubierto que los hombres con sobrepeso u obesidad tienen un mayor riesgo de desarrollar un cáncer de próstata avanzado o un cáncer de próstata con mayor probabilidad de ser mortal.
Aunque no todos los estudios están de acuerdo, varios han encontrado un mayor riesgo de cáncer de próstata en los hombres cuyas dietas son altas en productos lácteos y calcio.
Por ahora, el mejor consejo sobre la dieta y la actividad para reducir posiblemente el riesgo de cáncer de próstata es:
- Alcanzar y mantener un peso saludable.
- Mantenerse físicamente activo.
- Seguir un patrón de alimentación saludable, que incluya una variedad de frutas y verduras de colores y cereales integrales, y que evite o limite las carnes rojas y procesadas, las bebidas azucaradas y los alimentos muy procesados.
También puede ser sensato limitar los suplementos de calcio y no ingerir demasiado calcio en la dieta. (Esto no significa que los hombres que están recibiendo tratamiento para el cáncer de próstata no deban tomar suplementos de calcio si su médico se los recomienda.)
Para obtener más información, consulte nuestra Guía de la Sociedad Americana del Cáncer sobre la dieta y la actividad física para la prevención del cáncer.
Suplementos de vitaminas, minerales y otros
Vitamina E y selenio: Algunos de los primeros estudios sugirieron que la toma de suplementos de vitamina E o selenio podría reducir el riesgo de cáncer de próstata.
Pero en un amplio estudio conocido como Selenium and Vitamin E Cancer Prevention Trial (SELECT), no se encontró que ni los suplementos de vitamina E ni de selenio redujeran el riesgo de cáncer de próstata. De hecho, se descubrió que los hombres del estudio que tomaban los suplementos de vitamina E tenían un riesgo ligeramente mayor de cáncer de próstata.
Soy e isoflavonas: Algunas de las primeras investigaciones han sugerido posibles beneficios de las proteínas de la soja (llamadas isoflavonas) para reducir el riesgo de cáncer de próstata. En la actualidad, varios estudios están analizando más detenidamente los posibles efectos de estas proteínas.
Tomar cualquier suplemento puede tener tanto riesgos como beneficios. Antes de empezar a tomar vitaminas u otros suplementos, hable con su médico.
Medicamentos
Algunos fármacos podrían ayudar a reducir el riesgo de cáncer de próstata.
Inhibidores de la 5-alfa reductasa
La 5-alfa reductasa es una enzima del organismo que transforma la testosterona en dihidrotestosterona (DHT), la principal hormona que hace crecer la próstata. Los fármacos denominados inhibidores de la 5-alfa reductasa, como la finasterida (Proscar) y la dutasterida (Avodart), impiden que esta enzima produzca DHT. Estos fármacos se utilizan para tratar la hiperplasia prostática benigna (HPB), un crecimiento no canceroso de la próstata.
Se han realizado grandes estudios sobre estos dos fármacos para ver si también podrían ser útiles para reducir el riesgo de cáncer de próstata. En estos estudios, los hombres que tomaban cualquiera de los dos fármacos eran menos propensos a desarrollar cáncer de próstata al cabo de varios años que los que recibían un placebo inactivo.
Cuando se analizaron los resultados con mayor detenimiento, los hombres que tomaban estos fármacos tenían menos cánceres de próstata de bajo grado, pero presentaban aproximadamente el mismo riesgo (o uno ligeramente superior) de cánceres de próstata de mayor grado, que tienen más probabilidades de crecer y extenderse. A largo plazo, no está claro si estos fármacos afectan a las tasas de mortalidad, ya que los hombres de estos estudios tuvieron una supervivencia similar tanto si tomaban uno de estos fármacos como si no.
Estos fármacos pueden provocar efectos secundarios sexuales como la disminución del deseo sexual y la disfunción eréctil (impotencia), así como el crecimiento del tejido mamario en algunos hombres. Sin embargo, pueden ayudar con los problemas urinarios derivados de la HBP, como la dificultad para orinar y las pérdidas de orina (incontinencia).
Estos fármacos no están aprobados por la FDA específicamente para ayudar a prevenir el cáncer de próstata, aunque los médicos pueden recetarlos «sin etiqueta» para este uso. En este momento, no está claro que tomar uno de estos fármacos sólo para reducir el riesgo de cáncer de próstata sea muy útil. Aun así, los hombres que quieran saber más sobre estos fármacos deberían consultarlos con sus médicos.
Aspirina
Algunas investigaciones sugieren que los hombres que toman una aspirina diaria podrían tener un menor riesgo de padecer y morir de cáncer de próstata. Pero se necesitan más investigaciones para demostrar si los posibles beneficios superan los riesgos. El uso prolongado de la aspirina puede tener efectos secundarios, como un mayor riesgo de hemorragias en el tracto digestivo. Aunque la aspirina también puede tener otros beneficios para la salud, en este momento la mayoría de los médicos no recomiendan tomarla sólo para intentar reducir el riesgo de cáncer de próstata.
Otros fármacos
Ahora se están estudiando otros fármacos y suplementos dietéticos que podrían ayudar a reducir el riesgo de cáncer de próstata. Pero hasta ahora, no se ha encontrado ningún fármaco o suplemento que sea útil en estudios lo suficientemente grandes como para que los expertos los recomienden.