Cuando la mayoría de la gente piensa en los trastornos alimentarios, piensa en chicas adolescentes hipercentradas en su peso. Pero los trastornos alimentarios se dan en todas las edades y géneros, incluidos los hombres. Los investigadores han estimado que los hombres representan aproximadamente el 10% de los individuos que son tratados por trastornos alimentarios.1 Sin embargo, se estima que el porcentaje de hombres entre las personas con trastornos alimentarios es mucho mayor, porque los trastornos alimentarios en los hombres a menudo son pasados por alto o diagnosticados erróneamente por los médicos. Un estudio realizado en el campus descubrió que uno de cada tres estudiantes que dio positivo en la prueba de detección de un trastorno alimentario era hombre. Los hombres también pueden ser menos propensos a buscar tratamiento para el trastorno alimentario debido al estigma cultural de que los trastornos sólo afectan a las mujeres.
Los síntomas de los trastornos alimentarios como la anorexia nerviosa, la bulimia nerviosa y el trastorno por atracón no difieren entre hombres y mujeres. Al igual que las mujeres, los hombres con trastornos alimentarios también corren el riesgo de desarrollar depresión, ansiedad y trastornos por consumo de sustancias. A lo largo de su vida, aproximadamente el 0,3% de los hombres sufrirán anorexia, el 0,5% bulimia y el 2% trastorno por atracón.2 Los hombres representan el 40% de las personas diagnosticadas con trastorno por atracón.3
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Factores de riesgo
La presión sobre la imagen corporal es uno de los factores más fuertes para predecir un trastorno alimentario en los hombres. Los medios de comunicación y la sociedad presentan el cuerpo masculino ideal como musculoso y tonificado, y muchos anunciantes de productos y programas de pérdida de peso y fitness se centran en este ideal. Un estudio reveló que aproximadamente el 90% de los adolescentes se ejercitan con el propósito de aumentar de peso.4 Las influencias psicológicas, genéticas y familiares también pueden desempeñar un papel importante.5 Los hombres también pueden experimentar un mayor riesgo cuando participan en actividades deportivas que les exigen vigilar y controlar su peso. Estos deportes pueden incluir la gimnasia, la natación, el baile, el jockey, la lucha, el remo, la carrera y el culturismo. Los hombres homosexuales también pueden estar en mayor riesgo debido a la mayor presión para lograr un cuerpo tonificado, pero algunos investigadores son escépticos sobre si existe una disparidad de riesgo debido a la orientación sexual.6
Opciones de tratamiento
Los hombres con trastornos alimentarios pueden ser menos propensos a buscar tratamiento debido a los estigmas contra el tratamiento de salud mental, así como el mito de que los trastornos alimentarios sólo se producen en las mujeres. Los hombres pueden sentirse incómodos participando en un programa de tratamiento que es predominantemente femenino, por lo que es importante hablar con un médico sobre la posibilidad de un tratamiento centrado en los hombres. El riesgo de mortalidad de los trastornos alimentarios es alto entre los hombres, al igual que entre las mujeres, por lo que es importante buscar tratamiento lo antes posible. Si trabajas con un consejero o profesional de la salud mental, pregúntale si tiene experiencia trabajando con hombres con trastornos alimentarios. Los grupos de apoyo, tanto en persona como en línea, pueden desempeñar un papel vital en la recuperación de los hombres con trastornos alimentarios.
Si eres un hombre con un trastorno alimentario, también es importante que hables con tu médico sobre tu salud física, así como sobre tu salud mental. Los hombres con anorexia tienen un mayor riesgo de desarrollar afecciones óseas como la osteopenia y la osteoporosis, y pueden necesitar un suplemento de testosterona. Los hombres con bulimia pueden sufrir caries, complicaciones intestinales y esofágicas, así como desequilibrios electrolíticos. Los hombres con trastornos por atracones pueden experimentar una presión arterial y un colesterol más altos, complicaciones en la vesícula biliar, enfermedades cardíacas y diabetes de tipo 2.7
Hablar con un ser querido
Si tienes un amigo o familiar varón que puede tener un trastorno alimentario, es importante que le expreses tu preocupación por su salud. Comparte con ellos los comportamientos que has observado y lo que te preocupa. Explica cómo te duele verles luchar y elogia los rasgos positivos (no físicos) que ves en ellos. Pregúntales qué les gustaría hacer y si necesitan que alguien les ayude a encontrar ayuda. Si eres el padre de un menor, es importante que los involucres en el proceso y les preguntes qué tipo de ayuda les gustaría.
Los trastornos alimentarios son tratables, y hay ayuda disponible para los hombres que luchan con uno. ¿A quién puedes reclutar hoy para que te ayude a tratar tu cuerpo con amabilidad y cuidado?