Cada septiembre se celebra el Mes Mundial del Alzheimer, una campaña internacional anual diseñada para concienciar y desafiar el estigma que rodea a la demencia. En honor al Mes Mundial del Alzheimer en general y al Día Mundial del Alzheimer en particular, el 21 de septiembre, exploramos la importancia de la Escala Rápida o Escala de Evaluación Funcional de Reisberg (FAST) que ayuda a los médicos, a los pacientes y a sus seres queridos a discutir y entender el progreso de la enfermedad de Alzheimer y la demencia. Si su ser querido está en un centro de cuidados paliativos y padece demencia en San Mateo y en otros lugares, lo más probable es que oiga mencionar esta escala en algún momento dentro de las reuniones con el equipo de cuidados.
FAST incluye un sistema de siete etapas que se basa en el nivel de funcionamiento de la persona y en sus actividades diarias. Sin embargo, FAST se centra más en el nivel de funcionamiento y las actividades de la vida diaria de la persona que en el deterioro cognitivo. Por lo tanto, es posible que alguien se encuentre en un estadio cognitivo diferente (denominado Escala de Deterioro Global para la Evaluación de la Demencia Degenerativa Primaria o GDS) y tenga un funcionamiento diferente (estadio FAST), según Dementia Care Central.
La escala FAST resulta ser la medida más validada del curso de la enfermedad de Alzheimer en la literatura científica publicada.
¿Qué es la escala FAST?
La Escala FAST se compone de las siguientes siete categorías, siendo las cinco primeras:
- Sin deterioro cognitivo; funcionamiento normal
- Posible deterioro cognitivo leve
- Deterioro cognitivo leve; interferencia en tareas complejas
- Demencia leve, que afecta a tareas cotidianas como cocinar o realizar operaciones bancarias
- Demencia moderada, por la que la persona necesita ayuda para elegir la ropa adecuada, por ejemplo.
La categoría seis se divide en subestadios e implica dificultades con actividades cotidianas como vestirse y bañarse. Esas subetapas incluyen:
- Dificultad para vestirse
- Dificultad para bañarse
- Incapacidad para usar el baño sin ayuda
- Incontinencia urinaria
- Incontinencia fecal
- Locución muy limitada
- Poco o nada de habla inteligible
- Incapacidad para caminar
- Incapacidad para sentarse sin ayuda
- Incapacidad para sonreír
- Incapacidad para mantener la cabeza en alto sin ayuda
Una vez que llega la etapa siete, el paciente empieza a perder la capacidad de hablar y moverse. Esas subetapas son:
Duración de cada etapa
La enfermedad de Alzheimer siempre sigue una clara progresión a través de la escala FAST, con todos los pasos que suelen ocurrir en orden, aunque algunas etapas pueden superponerse. Sin embargo, esto no siempre es cierto en otras formas de demencia, en las que los pacientes pueden saltarse etapas. En el caso de los pacientes de Alzheimer, la escala FAST proporciona a los médicos una duración media esperada para cada etapa, pero no hay una ciencia exacta para el momento en que se produce. El tratamiento puede prolongar el tiempo que tarda una persona en pasar por las etapas. La rapidez con la que se recorre la escala dependerá del tratamiento recibido, así como del estado particular del paciente. En promedio, sin embargo, una persona con Alzheimer vive alrededor de cuatro a ocho años después del diagnóstico, pero puede vivir hasta 20 años, según la Asociación de Alzheimer.
Puede haber muchos años de cambios sutiles en el cerebro antes de que una persona incluso muestre signos de la enfermedad, conocida como enfermedad de Alzheimer preclínica. En la actualidad, 5,7 millones de estadounidenses viven con Alzheimer. Para 2050, se espera que esta cifra aumente a 14 millones. Es la sexta causa de muerte en este país, matando más que el cáncer de mama y el de próstata juntos. De hecho, cada 65 segundos, alguien en Estados Unidos es diagnosticado con la enfermedad de Alzheimer.
La escala FAST: Criterios para los cuidados paliativos
Los pacientes en cuidados paliativos que padecen Alzheimer suelen estar en el estadio siete. Aquí es donde experimentan una dificultad significativa con la comunicación y el movimiento independiente. Además de eso, muchas personas con Alzheimer también sufren otras afecciones, como una enfermedad coronaria. Todos estos factores se tienen en cuenta cuando los médicos deciden si el paciente cumple los requisitos para recibir cuidados paliativos. Normalmente, cuando son admitidos en los cuidados paliativos, los pacientes de Alzheimer se encuentran en las fases finales de la enfermedad. Suelen:
- Requieren asistencia las 24 horas del día para las actividades diarias y el cuidado personal
- Pierden la conciencia de las experiencias recientes y del entorno
- Experimentan cambios en las capacidades físicas, con dificultad para caminar sentarse y tragar
- Tienen más dificultades para comunicarse
- Son vulnerables a las infecciones, especialmente a la neumonía
En las etapas finales, los individuos tienen problemas para responder a su entorno, mantener conversaciones y controlar el movimiento. Todavía pueden pronunciar palabras o frases, pero comunicar el dolor que sienten o las necesidades que tienen puede resultar muy difícil. A medida que la memoria y las habilidades cognitivas declinan, pueden ocurrir grandes cambios de personalidad, con pacientes que requieren ayuda adicional con las actividades diarias.
Contacte con Pathways Home Health and Hospice
Si alguien que usted ama se está moviendo a través de la escala FAST, nuestro equipo de cuidado de hospicio puede ayudarle a tomar decisiones sobre su cuidado mientras todavía tienen la capacidad de entrada. Nuestro objetivo es garantizar que esos deseos se cumplan cuando llegue el momento. Póngase en contacto con nosotros en el 888-755-7855 para saber cómo podemos ayudarle a usted y a su familia a navegar y entender la escala FAST en lo que respecta al viaje de su ser querido hacia el hospicio.