La vitamina D es vital, pero no siempre es fácil obtener la cantidad diaria en países más fríos como el Reino Unido. La vitamina D es producida por la piel al contacto con la luz solar. Según el NHS, se puede obtener la dosis diaria de vitamina D estando al aire libre durante cortos periodos de tiempo, sin protección solar, desde abril hasta septiembre.
Sin embargo, en otras épocas del año el sol puede no ser lo suficientemente fuerte: muchos no obtienen suficiente vitamina D sin suplementos y alimentos enriquecidos, especialmente en invierno.
El problema se ve agravado por otras tendencias, como el aumento del trabajo en interiores. También hay otros grupos de riesgo, como las personas mayores en residencias, los que se cubren la piel por motivos religiosos y las personas de piel oscura, todos los cuales pueden tener problemas para sintetizar suficiente vitamina D del sol.
De hecho, la deficiencia de vitamina D es común: la Encuesta Nacional de Dieta y Nutrición descubrió que una de cada cinco personas de entre 19 y 64 años, una de cada seis de 65 años o más y una cuarta parte de los niños de entre 11 y 18 años tenían niveles bajos de vitamina D durante todo el año.
Como resultado, el Instituto Nacional para la Salud y la Excelencia Asistencial (NICE) recomienda que todos los adultos del Reino Unido tomen un suplemento diario que contenga 400IU (10mcg) de vitamina D durante todo el año.
Vitamina D2 frente a D3
La vitamina D3 (colecalciferol) es la forma más importante para la salud humana, y es la mejor forma para tomar como suplemento. Anteriormente, la vitamina D3 de Healthspan se obtenía de la lanolina, que proviene de la lana de oveja.
Tradicionalmente, la vitamina D obtenida de las plantas ha sido la forma D2 (ergocalciferol). Esta forma tiene una estructura ligeramente diferente a la de la vitamina D3, lo que la hace menos beneficiosa para mantener los niveles de vitamina D en el cuerpo.1