Nutrición para el deporte y el ejercicio
Todos deberíamos intentar llevar una dieta sana y variada basada en los principios de la Guía Eatwell, y este es también el caso cuando se está activo. Cuando se realiza una actividad física, el cuerpo gasta más energía (calorías). Esto puede ayudar a controlar el peso o, si no está buscando perder peso, puede descubrir que necesita más alimentos para reemplazar la energía extra utilizada. También es importante mantenerse bien hidratado.
Comer bien para la actividad física y el deporte puede tener muchos beneficios, entre los que se incluyen:
- permitirle rendir bien en el deporte o la actividad elegida;
- reducir el riesgo de lesiones y enfermedades;
- garantizar la mejor recuperación después del ejercicio o de un programa de entrenamiento.
Sin embargo, los patrones dietéticos que mejor se adaptan a un individuo dependerán de la cantidad e intensidad de la actividad. Puede tratarse de personas que acaban de empezar a ser más activas, de personas que cumplen las directrices de actividad (150 minutos de actividad moderada a la semana), de personas activas a niveles más altos (como las que se entrenan para una prueba de resistencia como un maratón o practican deportes de equipo organizados) o de atletas profesionales. En el caso de los atletas profesionales, es probable que el asesoramiento nutricional personalizado por parte de un nutricionista o dietista deportivo cualificado sea una parte importante de su apoyo al entrenamiento.
La actividad física al perder peso
El hecho de realizar actividad física aumentará su gasto energético (las calorías que utiliza), ya que durante el ejercicio se necesita energía para alimentar los músculos que se contraen, el aumento de la respiración y la frecuencia cardíaca y el metabolismo.
Es difícil perder peso sólo por ser más activo y sigue siendo importante controlar la ingesta de calorías para controlar el peso. Los programas de pérdida de peso más eficaces incluyen tanto una dieta controlada como un aumento de la actividad física. También es importante ser activo para mantener el peso después de perderlo. Un estudio de personas en EE.UU. que han mantenido con éxito su pérdida de peso muestra que tienden a ser activos durante aproximadamente una hora al día (normalmente caminando) y pasan menos tiempo en actividades sedentarias como ver la televisión en su tiempo libre.
Los beneficios de la actividad física van más allá de la simple quema de calorías, y pueden ayudar a preservar el músculo a medida que se pierde peso y aumentar la proporción de músculo en el cuerpo. También sabemos que la actividad física, y pasar menos tiempo sentado, puede reducir el riesgo de desarrollar una serie de enfermedades crónicas, como las enfermedades del corazón.